Tengo una sensación de falsa felicidad que creo viene de la tristeza de mi madre.
Si ella está triste, yo debo estar feliz.
Por otra parte, dudo de todo, soy un poco socrática sin la parte machista de la época, por lo tanto me hace dudar hasta de la sensación de que es una falsa felicidad, y creo pensar que sí, que estoy bien, que mis pensamientos suicidas y todo lo negativo que me rodeaba ha desaparecido del día a la mañana.
Tengo dos hipótesis (la diferencia entre hipótesis y teoría es que la primera no la hemos podido demostrar), una para mi sensación de felicidad y otra para mi afirmación de mi felicidad.
La primera es que mi felicidad es falsa porque se ha terminado el verano, el cual a mí a diferencia de a vosotrxs me entristece mucho, y por fin he vuelto a la rutina de la universidad,es decir, el estudiar mantiene mi mente ocupada en otros pensamientos.
La otra es que el accidente me trajo a la realidad de golpe.
De golpe literalmente.
Que he vuelto al mundo de los vivos y he abandonado mi posición egoísta, además de que me he dado cuenta de la tristeza que provocaría en mis seres queridos, algo que no deseo.
Por último siento que analizo demasiado el sentimiento de felicidad y el por qué pero la tristeza simplemente la acepto como una parte más de mí.
La trsiteza es tan pura.
Otro día hablaré de ello.
Si ella está triste, yo debo estar feliz.
Por otra parte, dudo de todo, soy un poco socrática sin la parte machista de la época, por lo tanto me hace dudar hasta de la sensación de que es una falsa felicidad, y creo pensar que sí, que estoy bien, que mis pensamientos suicidas y todo lo negativo que me rodeaba ha desaparecido del día a la mañana.
Tengo dos hipótesis (la diferencia entre hipótesis y teoría es que la primera no la hemos podido demostrar), una para mi sensación de felicidad y otra para mi afirmación de mi felicidad.
La primera es que mi felicidad es falsa porque se ha terminado el verano, el cual a mí a diferencia de a vosotrxs me entristece mucho, y por fin he vuelto a la rutina de la universidad,es decir, el estudiar mantiene mi mente ocupada en otros pensamientos.
La otra es que el accidente me trajo a la realidad de golpe.
De golpe literalmente.
Que he vuelto al mundo de los vivos y he abandonado mi posición egoísta, además de que me he dado cuenta de la tristeza que provocaría en mis seres queridos, algo que no deseo.
Por último siento que analizo demasiado el sentimiento de felicidad y el por qué pero la tristeza simplemente la acepto como una parte más de mí.
La trsiteza es tan pura.
Otro día hablaré de ello.